De acuerdo con datos de la NASA, las emisiones de metano han aumentado drásticamente desde 2006. Algunas de las fuentes conocidas de este aumento son la industria petrolera, la gasera; así como la producción microbiana en ambientes tropicales húmedos.
John Worden, investigador del Laboratorio de Propulsión a chorro de la NASA, junto con su equipo, se centró también en los incendios, los cuales han presentado cambios recientes a nivel mundial. De acuerdo con estos científicos, el área quemada ha disminuido 12 %. La hipótesis era que, dada esta situación, las emisiones de metano también debían ser menores; sin embargo, en realidad aumentaron al doble.
¿Cuál es la explicación del aumento?
Las concentraciones atmosféricas de metano se miden en teragramos. Cada teragramo equivale a 110 mil toneladas. De acuerdo con los investigadores, cada año, las emisiones de metano aumentan 25 teragramos.
Para identificarlas, los científicos debes rastrear otros gases, firmas isotópicas y observaciones del uso de la tierra, ya que sus moléculas por sí mismas no son fáciles de detectar en la atmósfera.
Los investigadores de este estudio recurrieron a los isótopos de metano identificados en los incendios, emisiones de combustibles y emisiones microbianas. Con datos del monóxido de carbono y del metano, obtenidos con los satélites Terra y Aura de la NASA, pudieron cuantificar las emisiones de metano del fuego.
Los resultados fueron una disminución de 4 teragramos de metano causado por los incendios; pero el 17 de los teragramos aún provienen de los combustibles fósiles; y 12 teragramos son consecuencia de humedales o arrozales.